El aceite sintético es ideal para ayudar a disminuir el desgaste, corrosión y polución de los motores. De ese modo, su rendimiento y demanda ante las altas temperaturas también se verán aumentados. Principales beneficios de utilizar aceite sintético: - No hay pérdida de lubricación ante temperaturas frías. - Cuenta con mayor duración. - Resistente a la oxidación, sedimentación y daño térmico a causa de altas temperaturas. - Permite una mayor lubricación del motor en los encendidos. - Prolonga la vida útil del motor y economía del combustible. Existen dos tipos de aceites sintéticos, por un lado el puro, es decir, 100% sintético. Por el otro, el aceite de mezcla sintética, también conocido como semisintético. Estos se componen de mezclas de aceites normales (minerales) con aceites de base sintética. Además, los aceites pueden variar dependiendo el kilometraje del motor del vehículo en cuestión: En motores que posean menos de 100.000 kilómetros, se aplica aceite sintético 5W30, 5W40 o bien 10W30 y 10W40. En el caso de que el motor cuente con un kilometraje superior a los 100.000 kilómetros, entonces se aplica un aceite de mayor viscosidad, como el 20W50 o el 20W60.