El cerco jardín es un elemento fundamental para delimitar y embellecer espacios exteriores, ofreciendo diversas características y especificaciones que se adaptan a las necesidades de cada jardín. Fabricado en materiales como madera, metal, PVC o malla, con alturas que van desde 50 cm hasta 2 metros, este elemento permite crear áreas definidas de manera efectiva y estética. Disponible en una amplia gama de colores, resistente a la intemperie y de fácil instalación, el cerco jardín puede presentar diferentes estilos, desde modelos sólidos hasta diseños decorativos o con enrejado. En el mercado chileno, se encuentran diversos tipos de cercos de jardín, como los de madera, metálicos, de malla, PVC o vivos, cada uno con sus propias características en cuanto a resistencia, estética, instalación y mantenimiento. Es importante considerar estas especificaciones al elegir el cerco jardín más adecuado para cada espacio exterior.

Características y Especificaciones del Cerco Jardín

Material:

El cerco jardín puede estar fabricado en madera, metal, PVC o malla, ofreciendo diferentes opciones para adaptarse al estilo y necesidades de cada jardín.

Altura:

La altura del cerco jardín varía entre 50 cm y 2 metros, permitiendo delimitar áreas de manera efectiva y estética, según las preferencias del usuario.

Color:

Disponible en una amplia gama de colores como verde, blanco, marrón o negro, para combinar con la estética del jardín y lograr un aspecto armonioso.

Resistente a la intemperie:

Diseñado para resistir condiciones climáticas adversas, el cerco jardín garantiza durabilidad y mantenimiento mínimo a lo largo del tiempo.

Fácil instalación:

Se puede colocar en el suelo de manera sencilla o fijar a una estructura existente, facilitando su instalación y adaptación a diferentes espacios exteriores.

Estilos:

El cerco jardín puede presentar diferentes estilos, desde modelos sólidos hasta diseños decorativos o con enrejado, brindando opciones para cada preferencia estética.

Mantenimiento:

Algunos modelos requieren poco o ningún mantenimiento, mientras que otros pueden necesitar ser pintados o tratados periódicamente, dependiendo del material seleccionado.

Estas características y especificaciones pueden variar según el fabricante y el tipo de cerco jardín elegido, ofreciendo versatilidad y funcionalidad para delimitar y embellecer espacios exteriores en jardines y áreas verdes.

Tipos de cercos de jardín

En el mercado chileno, es posible encontrar una variedad de cercos de jardín que se adaptan a las necesidades y gustos de los consumidores. Entre los tipos más comunes se encuentran los cercos de madera, que aportan un aspecto rústico y natural al jardín, los cercos metálicos que ofrecen mayor durabilidad y resistencia, y los cercos de malla, ideales para delimitar áreas de forma discreta y permitir la circulación del aire y la luz.

Además, existen cercos de PVC que son fáciles de instalar y requieren poco mantenimiento, así como cercos vivos que consisten en plantas que crecen formando una barrera natural. Cada tipo de cerco de jardín tiene sus propias características en cuanto a resistencia, estética, facilidad de instalación y mantenimiento, por lo que es importante considerar estos aspectos al momento de elegir el más adecuado para cada espacio.