La lana de vidrio aislante es un material inorgánico y no inflamable que ofrece excelentes capacidades de aislamiento térmico y acústico. Resistente a la humedad y al moho, este material es fácil de instalar y contribuye a la eficiencia energética de los edificios. Con especificaciones técnicas que incluyen densidad, conductividad térmica, espesor, ancho y largo, temperatura máxima de servicio y clasificación de reacción al fuego, la lana de vidrio aislante se presenta en diferentes tipos en el mercado chileno, adaptándose a diversas necesidades de aislamiento en la construcción.

Características generales

Material inorgánico y no inflamable

La lana de vidrio aislante es un material inorgánico que no arde, lo que la convierte en una opción segura para el aislamiento de edificaciones. Su composición a base de vidrio reciclado le otorga esta propiedad, brindando tranquilidad en cuanto a la prevención de incendios.

Excelente capacidad de aislamiento térmico y acústico

Una de las principales ventajas de la lana de vidrio aislante es su capacidad para aislar tanto térmica como acústicamente. Esto significa que ayuda a mantener la temperatura interior constante y a reducir la transmisión de ruidos externos, mejorando así el confort en el interior de los espacios.

Resistente a la humedad y al moho

Gracias a su estructura y composición, la lana de vidrio es resistente a la humedad, evitando la formación de moho y hongos en las superficies donde se instala. Esto contribuye a mantener la calidad del aire interior y a prevenir problemas de salud asociados a la humedad.

Fácil de instalar y manipular

La lana de vidrio aislante es un material flexible y liviano, lo que facilita su instalación en diferentes tipos de superficies y estructuras. Además, al ser fácil de cortar y manipular, se adapta a las necesidades específicas de cada proyecto de construcción, agilizando el proceso de instalación.

Contribuye a la eficiencia energética de los edificios

Al proporcionar un excelente aislamiento térmico, la lana de vidrio contribuye a reducir la pérdida de calor en invierno y el ingreso de calor en verano, lo que se traduce en un menor consumo de energía para climatizar los espacios. Esto no solo beneficia el medio ambiente, sino que también supone un ahorro económico a largo plazo.

Especificaciones técnicas

Densidad

La lana de vidrio aislante presenta una densidad que varía entre 10 y 48 kg/m³, lo que le confiere la capacidad de ofrecer diferentes niveles de aislamiento según las necesidades específicas de cada proyecto de construcción.

Conductividad térmica

Con valores que oscilan entre 0,032 y 0,048 W/mK, la lana de vidrio garantiza una eficiente transmisión del calor, contribuyendo a mantener la temperatura interior de manera constante y reduciendo la necesidad de utilizar sistemas de calefacción o refrigeración de forma excesiva.

Espesor

El espesor de la lana de vidrio aislante puede variar entre 50 y 200 mm, lo que permite adaptar su uso a diferentes requerimientos de aislamiento térmico y acústico en función de las condiciones climáticas y las características de la edificación.

Ancho y largo

Con dimensiones estándar de 1200 mm de ancho y 5000 mm de largo, la lana de vidrio facilita su manipulación e instalación en diferentes áreas y superficies, optimizando el rendimiento del material y agilizando el proceso de aislamiento.

Temperatura máxima de servicio

La lana de vidrio aislante puede soportar temperaturas de hasta 250°C, lo que la hace adecuada para su aplicación en sistemas de calefacción o en áreas donde se requiera un aislamiento térmico de alta resistencia.

Clasificación de reacción al fuego

Con una clasificación de reacción al fuego A1, la lana de vidrio aislante es un material que no contribuye a la propagación del fuego, brindando seguridad y protección en caso de incendios, lo que la convierte en una opción confiable para el aislamiento en edificaciones.

Tipos de lana de vidrio aislante

En el mercado chileno, la lana de vidrio aislante se presenta en diferentes tipos según su densidad y grosor. Por lo general, se pueden encontrar lanas de vidrio de baja densidad, ideales para aislamientos térmicos en techos y paredes, así como lanas de vidrio de alta densidad, recomendadas para aplicaciones que requieren un mayor nivel de aislamiento acústico.

Otro tipo de lana de vidrio aislante que se encuentra en el mercado es aquella con barrera de vapor, la cual es especialmente útil en zonas con alta humedad. Además, existen lanas de vidrio con diferentes acabados superficiales, como papel kraft o aluminio reforzado, que brindan mayor resistencia a la humedad y facilitan su instalación en diferentes áreas de la construcción.