El manteca de karité es un producto natural ampliamente utilizado en la industria cosmética y de cuidado personal. Proviene de las nueces del árbol de karité y se presenta con una textura suave y cremosa. Su color es blanco o marfil, y posee un agradable aroma característico debido a su alto contenido de ácidos grasos y vitaminas. Además, sus especificaciones técnicas, como su punto de fusión, índice de saponificación y contenido de ácidos grasos, lo convierten en un ingrediente versátil y beneficioso para la piel y el cabello. Con diferentes tipos disponibles en el mercado, como la manteca cruda y la refinada, este producto ofrece hidratación, nutrición y protección, siendo un aliado ideal para el cuidado personal.

Características del Manteca de Karité

El manteca de karité es un producto natural ampliamente utilizado en la industria cosmética y de cuidado personal. Proviene de las nueces del árbol de karité y se presenta con una textura suave y cremosa. Su color es blanco o marfil, y posee un agradable aroma característico debido a su alto contenido de ácidos grasos y vitaminas.

Especificaciones Técnicas

El manteca de karité tiene un punto de fusión que oscila entre 32°C y 38°C. Su índice de saponificación se encuentra entre 185 y 195. En cuanto a su contenido de ácido esteárico, varía entre 30% y 45%, mientras que el contenido de ácido oleico se sitúa entre 40% y 60%. Además, contiene entre un 3% y 11% de ácido linoleico y entre un 7% y 12% de insaponificables.

Todas estas características y especificaciones hacen del manteca de karité un ingrediente versátil y beneficioso para la piel y el cabello. Proporciona hidratación, nutrición y protección, convirtiéndolo en un aliado ideal para el cuidado personal.

Tipos de manteca de karité

Existen diferentes tipos de manteca de karité en el mercado, cada uno con sus propias características y beneficios. La manteca de karité cruda es la forma más pura y sin refinar, conservando así todas sus propiedades naturales. Es ideal para hidratar la piel seca, reparar el cabello dañado y aliviar irritaciones cutáneas.

Por otro lado, la manteca de karité refinada ha pasado por un proceso de refinamiento para eliminar su olor y color característicos, lo que la hace más adecuada para su uso en productos cosméticos. También existen mezclas de manteca de karité con otros ingredientes, como aceites esenciales, para potenciar sus beneficios y crear productos específicos para diferentes necesidades de la piel y el cabello.